El intendente Fernando Gray salió al cruce de Andrés Larroque por sus declaraciones incendiarias. Pidió accionar a Axel Kicillof.
La interna en el Frente de Todos no encuentra la calma y cada vez hay más opiniones que llenan el vaso, que parece estar a punto de derramarse. Tras las fulminantes críticas de Andrés Larroque, fue el intendente Fernando Gray el que salió a poner los putos.
Es conocida la disputa que lleva el intendente de Esteba Echeverría con La Cámpora, por lo que encontró la oportunidad para señalar la “falta de orden” que hay dentro del Frente de Todos y acusó al presidente Alberto Fernández y al gobernador Axel Kicillof de no ajustar las riendas.
“Creo que hay un desorden, le corresponde al presidente poner las cosas en su lugar. Es inadmisible que en un gobierno, un ministro provincial le diga a un presidente lo que tiene que hacer”, disparó Gray.
En ese sentido, marcó las diferencias que hay entre las discusiones de la política y las demandas de la sociedad sobre temáticas como inflación, empleo, educación o seguridad.
Gray sostiene su pelea con La Cámpora desde el año pasado cuando perdió la conducción del Partido Justicialista de la Provincia en manos de Máximo Kirchner, algo que hasta tuvo su repercusión en la Justicia.
“Discuto a La Cámpora, porque lo que hace es comparar todo el tiempo. Ahora cuestionan la negociación con el Fondo, a donde yo nunca hubiese ido, pero esto hay que arreglarlo. Si comparás después de Néstor no va a haber nadie que negocie así, entonces cualquier negociación va a quedar como más chica”, sostuvo Gray.
Ahí fue que marcó la responsabilidad de Axel Kicillof, con quien mantiene una relación de distancia desde hace tiempo. Incluso Gray llegó a manifestar que no es recibido en las oficinas de La Plata por el mandatario.
“El gobernador se tiene que poner el traje de gobernador y ordenar el gabinete, un ministro no puede salir a declarar en contra de otro estamento. Nos pasan cosas que no deben pasar en una estructura de gobierno”, sentenció.
Si hay alguien con quien no le conviene mantener malas relaciones a Kicillof, ese es Fernando Gray. Es que el intendente cuenta con un voto clave en el Senado bonaerense, donde reina la polaridad entre oficialismo y oposición.
La senadora Magdalena Goris, esposa de Gray, es uno de los 23 votos que tiene el oficialismo en la Cámara alta, pero como la oposición tiene la misma cantidad de bancas, una abstención o voto negativo de la legisladora podría representar la caída de cualquier proyecto que quiera aprobar el Ejecutivo.
“Hay sectores que avanzan, pero el desorden se produce cuando el que conduce no ordena lo suficiente”, cerró Gray.